Somos lo que comemos. Parece simple retórica pero es totalmente cierto, la alimentación no solo influye en nuestro peso, condición física o estado de ánimo, científicos han demostrado que los alimentos que comemos a diario inciden en la fecundidad, tanto en hombres como en mujeres. Sigue leyendo porque en esta entrega de Activa Tu Belleza traemos la dieta de la fertilidad.
Cada día son más comunes los artículos que relacionan a los alimentos con la fertilidad y aunque es cierto que en la mayoría de los casos la causa de la infertilidad es multifactorial, según la ginecóloga María de la Calle, coautora del libro ‘la dieta de la fertilidad y el embarazo’, “ambos miembros de la pareja tienen posibilidades de concebir cambiando algunos aspectos de su dieta diaria”.
Para las damas
La causa más frecuente de esterilidad femenina es el denominado síndrome de ovario poliquístico, en ocasiones asociado a obesidad y resistencia a la insulina. En este caso, especialistas recomiendan una dieta abundante en frutas y verduras, frutos secos y alimentos ricos en fibra. Cuanta más fibra, más bajo el índice glucémico.
Un estudio muestra una relación directa entre la ingesta de comida rápida y un mayor tiempo en lograr un embarazo
Los alimentos ricos en inositol, un derivado de la vitamina B, como cereales integrales, frutas cítricas, semillas y judías; contribuyen a restaurar el desequilibrio hormonal en el ovario poliquístico. Y el resveratrol, presente en la uva roja, los frutos rojos, cacahuetes, el chocolate amargo y las ostras; mejora la ritmicidad del ciclo menstrual.
Las mujeres con este síndrome deben evitar alimentos con alto contenido glucémico como dulces, productos elaborados con harinas blancas y azúcar refinada, también un exceso de patatas, maíz dulce y frutas ricas en azúcares como higos, uvas pasas, plátanos o dátiles.
Si existe sobrepeso u obesidad, es recomendable adelgazar, ya que una reciente investigación concluyó que las parejas obesas pueden tardar hasta 60% más de tiempo en concebir.
Para los caballeros
Una dieta rica en nutrientes como los ácidos grasos omega 3, presente en el aceite de oliva, pescado azul o frutos secos, es fundamental para la espermatogénesis.
Otros alimentos que se asocian a una mejoría de la calidad espermática son los que contienen antioxidantes que eliminan el exceso de radicales libres, por ejemplo la vitamina E presente en aceites vegetales, nueces, semillas y verduras de hoja verde mantienen las membranas celulares, la vitamina C que aportan los pimientos, tomates y cítricos mejoran el número y la motilidad de los espermatozoides.
El betacaroteno de las zanahoria, espinacas y la calabaza favorecen la motilidad, el licopeno del tomate mejora la morfología espermática y el folato (Vitamina B9) que aportan los vegetales de hoja verde, legumbres, levadura de cerveza, las almendras, se asocian a una mejoría de la calidad espermática.
Los investigadores también han determinado que el déficit de selenio, zinc, criptoxantina y otras vitaminas como la D, presente en la yema de huevo, salmón y sobre todo en los rayos solares; puede estar relacionado con una disminución en la producción de testosterona y una menor síntesis de espermatozoides.
Algunos estudios encuentran la disminución de la calidad seminal asociada al consumo excesivo de carnes rojas y procesadas, alimentos ricos en soja, dulces y bebidas edulcoradas, ciertos lácteos enteros y la ingesta de alcohol y cafeína, por ello la tendencia de vida saludable aplicada a la fertilidad ha tenido tanta acogida alrededor del mundo, el bienestar parte de nuestro balance interior.